Al final no pudo ser. A diez minutos para el final del encuentro, Mario Suárez ha empatado el partido que había inaugurado Varela con un gran remate desde fuera del área. En los penaltis, Lux no ha conseguido parar ningún disparo mientras que Jurado ha sido el único de los cuatro lanzadores que ha fallado.
Gregorio Manzano presentaba un once compuesto por Corrales en el lateral izquierdo, Nunes y Ramis de centrales y Josemi como lateral derecho. En el centro del campo y confiando con el esquema de doble pivote, Jurado y Pep Lluis Martí se encargaban de la sala de máquinas, mientras que Varela estaba en la derecha y Castro en la izquierda. Finalmente Webó y Arango formaban las puntas de ataque.
Cuando ambos equipos comenzaban a asentarse en el césped mallorquinista, Jurado era el encargado de hacer efectivo un lanzamiento de falta desde la esquina izquierda del área del PSV. El centrocampista la retrasaba para Fernando Varela y el sevillano mandaba un espectacular trallazo desde fuera del área que suponía el 1-0. Tras el gol, el Mallorca era quien llevaba la rienda de un partido donde faltaban las ocasiones claras. Juan Arango ponía más tarde un nuevo balón con peligro tras lanzar una falta desde fuera del área y Nunes debía rematarla de cabeza, pero no lo lograba.
La siguiente gran ocasión pasaba nuevamente por las botas del delantero venezolano. La jugada nacía en una magistral jugada de Corrales por la banda derecha en la que sentaba fácilmente a un defensa, haciéndole pasar el esférico por encima de la cabeza y tras un breve control, lo enviaba directo al segundo palo donde el ’18’ mallorquinista le esperaba para rematar pero no medía bien su fuerza y se esfumaba esta gran oportunidad de marcar la diferencia.
Hasta el último instante de la primera parte el conjunto de Manzano continuaba buscando el 2-0. Era ahora el turno de Pierre Webó pero el camerunés chutaba dentro del área con el objetivo se superar sólo al portero pero se volvía a escapar por encima del larguero. El PSV por su parte no daba gran dosis de trabajo al guardameta Miquel Àngel Moyà, que sólo tenía que salir en una ocasión sin demasiado peligro. De este modo finalizaba el primer tiempo.
Nada más empezar la segunda parte, las tornas parecían haberse cambiado ya que el juego se repartía entre los jugadores holandeses y además, cada minuto que transcurría se iba languideciendo, perdiendo la chispa de los primeros 45 minutos hasta que Varela volvía a hacer de las suyas. El andaluz recogía un balón de una carrera de Pierre Webó por la banda derecha y remataba desde fuera del área, poniendo en apuros al guardameta Isaksson.
El Mallorca parecía tener su pólvora humedecida, así que Manzano optaba por dar entrada a Trejo (por Varela), Mario Suárez (por Pep Lluís Martí) y Lux.(por Moyà). De los tres recién salidos, era el delantero argentino quien mejor aprovechaba los minutos dejando detalles de gran calidad. Sólo diez minutos más tarde era el turno de Keita y Ayoze.
Sobre el minuto 80, Juan Arango volvía a aparecer en el encuentro con un potente chut desde fuera del área que volvía a morir por encima del larguero. Poco faltaba ahora para que el PSV reaccionara y Dzsudzsak era el responsable de la primera ocasión de peligro de los tulipanes. Sólo un minuto más tarde, Mario Suárez ponía la igualada tras una jugada muy confusa en el área pequeña (1-1). En estos instantes el partido era del PSV y por ese motivo, el delantero Lazovic enviaba el balón al fondo de la red, estando en posición antirreglamentaria.
No era suficiente el esfuerzo realizado en el tramo final y se llegaba irremediablemente a los penaltis. Jurado fallaba el primero de ellos y este hecho su sumaba a que Lux no paró ni uno.
El RCD Mallorca se despedía de su afición con una derrota y con una noticia; la salida inminente de Borja Valero al West Bromwich Albion. Trejo por su parte aseguraba a la finalización del encuentro que su intención pasa por “quedarme en el Mallorca”.
Gregorio Manzano presentaba un once compuesto por Corrales en el lateral izquierdo, Nunes y Ramis de centrales y Josemi como lateral derecho. En el centro del campo y confiando con el esquema de doble pivote, Jurado y Pep Lluis Martí se encargaban de la sala de máquinas, mientras que Varela estaba en la derecha y Castro en la izquierda. Finalmente Webó y Arango formaban las puntas de ataque.
Cuando ambos equipos comenzaban a asentarse en el césped mallorquinista, Jurado era el encargado de hacer efectivo un lanzamiento de falta desde la esquina izquierda del área del PSV. El centrocampista la retrasaba para Fernando Varela y el sevillano mandaba un espectacular trallazo desde fuera del área que suponía el 1-0. Tras el gol, el Mallorca era quien llevaba la rienda de un partido donde faltaban las ocasiones claras. Juan Arango ponía más tarde un nuevo balón con peligro tras lanzar una falta desde fuera del área y Nunes debía rematarla de cabeza, pero no lo lograba.
La siguiente gran ocasión pasaba nuevamente por las botas del delantero venezolano. La jugada nacía en una magistral jugada de Corrales por la banda derecha en la que sentaba fácilmente a un defensa, haciéndole pasar el esférico por encima de la cabeza y tras un breve control, lo enviaba directo al segundo palo donde el ’18’ mallorquinista le esperaba para rematar pero no medía bien su fuerza y se esfumaba esta gran oportunidad de marcar la diferencia.
Hasta el último instante de la primera parte el conjunto de Manzano continuaba buscando el 2-0. Era ahora el turno de Pierre Webó pero el camerunés chutaba dentro del área con el objetivo se superar sólo al portero pero se volvía a escapar por encima del larguero. El PSV por su parte no daba gran dosis de trabajo al guardameta Miquel Àngel Moyà, que sólo tenía que salir en una ocasión sin demasiado peligro. De este modo finalizaba el primer tiempo.
Nada más empezar la segunda parte, las tornas parecían haberse cambiado ya que el juego se repartía entre los jugadores holandeses y además, cada minuto que transcurría se iba languideciendo, perdiendo la chispa de los primeros 45 minutos hasta que Varela volvía a hacer de las suyas. El andaluz recogía un balón de una carrera de Pierre Webó por la banda derecha y remataba desde fuera del área, poniendo en apuros al guardameta Isaksson.
El Mallorca parecía tener su pólvora humedecida, así que Manzano optaba por dar entrada a Trejo (por Varela), Mario Suárez (por Pep Lluís Martí) y Lux.(por Moyà). De los tres recién salidos, era el delantero argentino quien mejor aprovechaba los minutos dejando detalles de gran calidad. Sólo diez minutos más tarde era el turno de Keita y Ayoze.
Sobre el minuto 80, Juan Arango volvía a aparecer en el encuentro con un potente chut desde fuera del área que volvía a morir por encima del larguero. Poco faltaba ahora para que el PSV reaccionara y Dzsudzsak era el responsable de la primera ocasión de peligro de los tulipanes. Sólo un minuto más tarde, Mario Suárez ponía la igualada tras una jugada muy confusa en el área pequeña (1-1). En estos instantes el partido era del PSV y por ese motivo, el delantero Lazovic enviaba el balón al fondo de la red, estando en posición antirreglamentaria.
No era suficiente el esfuerzo realizado en el tramo final y se llegaba irremediablemente a los penaltis. Jurado fallaba el primero de ellos y este hecho su sumaba a que Lux no paró ni uno.
El RCD Mallorca se despedía de su afición con una derrota y con una noticia; la salida inminente de Borja Valero al West Bromwich Albion. Trejo por su parte aseguraba a la finalización del encuentro que su intención pasa por “quedarme en el Mallorca”.
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